Ese momento en el
que acabas un libro y se hace el vacío en tu vida...
Y respiras
profundamente con una mezcla entre satisfacción y tristeza. Y sabes que vas a
echar terriblemente de menos a sus personajes... Y sientes que lo has leído
demasiado rápido, porque se te ha hecho corto. Y porque podrías haberlo
saboreado un poco más... Y te cuesta abrir otro porque piensas que de alguna
manera le estás traicionando. Que quizás es demasiado pronto, que deberías
darte más tiempo... Y tienes la certeza de que el próximo no va a ser tan bueno
seguro. Y te da hasta un poco de pereza empezar otra vez de cero. Otra
historia, otro lugar, otras personas...
Pero un día abres
otro. Y se obra el milagro de nuevo...
No hay comentarios:
Publicar un comentario